La conocida canción que Juan Luis Guerra popularizó en los años 90 hoy se encuentra más vigente que nunca producto de la inflación. En estos días, luego de ir al supermercado no es raro escuchar recurrentemente frases como “antes compraba más cosas con la misma plata” o “todo está caro, ya no me alcanza para nada”. Lo anterior no es una mera percepción, sino una realidad que tiene su explicación en el aumento histórico que ha tenido la inflación en los últimos meses, no solo en Chile sino a nivel global.
La inflación es el aumento generalizado y sostenido de los precios en un determinado período de tiempo. Este aumento de precios provoca que con la misma cantidad de dinero podamos comprar una menor cantidad de cosas. Por lo tanto, mientras más aumente la inflación menor poder adquisitivo tenemos.
¿Y los motivos? Bueno, los motivos de estos números históricos que hoy tenemos son diversos, lo cual también hace que la solución al problema no sea simple y sencilla. Es por eso que a pesar de los esfuerzos que ha realizado el Banco Central, los efectos no son permanentes, porque las causas del problema son variadas y poco controlables.
Por una parte, y siendo apuntada como la principal causa de esta situación por diversos economistas, está el excesivo aumento del gasto en 2021, dado por los diversos mecanismos que se utilizaron para intentar disminuir los efectos económicos provocados por la crisis sanitaria, como fueron los retiros y bonos. Además, de las limitaciones que hubo en el suministro de productos por las restricciones y la escasez de trabajadores.
A lo anterior, se suma el panorama mundial del impacto provocado por la invasión rusa a Ucrania, teniendo como consecuencias una mayor contracción en la disponibilidad de materias primas, generando problemas en las cadenas de distribución global de diversos productos.
Esto implica un escenario aún más pesimista, ya que Chile no es el único país en esta situación, sino que la inflación ha llegado a varios países más, uno de ellos nuestro importante socio comercial, Estados Unidos.
Los precios de los alimentos y los combustibles son los que han experimentado una mayor alza a nivel mundial. Así, nos encontramos con productos como el trigo y el aceite, ambos elementos básicos de la alimentación tradicional, con un aumento de sus precios por sobre el 50%, de acuerdo al Informe de Política Monetaria (IPoM) de junio del Banco Central.
La situación ha hecho que no solamente en nuestro país se tomen medidas, sino que los bancos centrales de distintos países han tenido que aumentar de manera más agresiva sus tasas de política monetaria.
La inflación afecta a todos los hogares, por lo tanto, se transforma en una prioridad para las autoridades poder controlarla, pues el costo de la vida sube para todos, pero, no a todos nos afecta por igual, y por supuesto, quienes tengan menos recursos serán quienes noten mucho más esta alza de los precios. Es por esto, que hoy más que nunca se hace determinante analizar con detenimiento las decisiones de gastos y cuidar el presupuesto familiar. Hoy es una buena alternativa priorizar el ahorro por sobre el gasto.
Paulina Ceballos Garrido