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Nuevos desafíos organizacionales para el 2016

[fusion_builder_container background_color=”” background_image=”” background_parallax=”none” enable_mobile=”no” parallax_speed=”0.3″ background_repeat=”no-repeat” background_position=”left top” video_url=”” video_aspect_ratio=”16:9″ video_webm=”” video_mp4=”” video_ogv=”” video_preview_image=”” overlay_color=”” overlay_opacity=”0.5″ video_mute=”yes” video_loop=”yes” fade=”no” border_size=”0px” border_color=”” border_style=”” padding_top=”20″ padding_bottom=”20″ padding_left=”” padding_right=”” hundred_percent=”no” equal_height_columns=”no” hide_on_mobile=”no” menu_anchor=”” class=”” id=””][fusion_builder_row][fusion_builder_column type=”1_1″ background_position=”left top” background_color=”” border_size=”” border_color=”” border_style=”solid” spacing=”yes” background_image=”” background_repeat=”no-repeat” padding=”” margin_top=”0px” margin_bottom=”0px” class=”” id=”” animation_type=”” animation_speed=”0.3″ animation_direction=”left” hide_on_mobile=”no” center_content=”no” min_height=”none”][fusion_text]Nuevo año, nuevas ideas, nuevo comienzo, energías renovadas. Estas aseveraciones caben para las personas, pero así también para los sistemas organizacionales, cualquiera sea su rubro o estructura. En el mundo globalizado y dinámico que vivimos, se hace imperioso que las empresas e instituciones busquen y apliquen estrategias para adaptarse a estas condiciones del entorno, no sólo aplicando nuevas tecnologías o invirtiendo en reacondicionar su planta física. Importante, pero se ha estudiado que no basta. No basta porque es muy común, en especial en organizaciones de nuestra zona, dejar de lado el activo más importante, el que genera mayor valor: nosotros, las personas, los colaboradores. Es relevante destacar que estas ideas ya dejaron de ser declaraciones de buenas intenciones, ya que está comprobado que una adecuada gestión de recursos humanos marca la diferencia en la efectividad y éxito de la misma. Existe una tendencia a creer que tener un sistema de remuneraciones sin fallos, buses de acercamiento y colación bastan. Pero no es así. La modernidad obliga a tener un adecuado sistema de selección de personas, un plan de beneficios y de reconocimiento, y programas de seguridad laboral. Y el factor más importante, a mi juicio, mantener un clima de trabajo y satisfacción laboral positiva. Pregúntese: ¿confía en las personas para las cuales trabaja?, ¿está orgulloso(a) de lo que hace?, ¿existe una sensación de equipo en la unidad donde trabaja? En esas cuestiones están las bases para reconocer el clima interno y comenzar los procesos de mejora, especialmente de la calidad de vida de todos los colaboradores(as). En resumidas cuentas, los pilares para evaluar y mejorar el clima laboral de su organización radican en los siguientes conceptos. Credibilidad: es como percibimos a las jefaturas y a la empresa, si entregan la información necesaria para ejercer las tareas, si se permite la comunicación abierta, si mi empresa tiene un manejo ético con nosotros y la sociedad. Respeto: percepción de cómo somos tratados, si nos prestan apoyo, si nos reconocen por el trabajo bien realizado, si se aceptan las ideas, si existe equilibrio entre la vida personal y laboral y si se nos considera como personas en su integridad. Orgullo: valor que la persona le atribuye a su trabajo y metas, e imagen de la compañía en la comunidad. Asimismo, el orgullo por pertenecer a un equipo de trabajo en especial. Compañerismo: sentimiento de equipo, existencia de un ambiente amigable para trabajar, si se estimula la realización de celebraciones por cumplimiento de metas u ocasiones especiales. Y finalmente, si se incentiva el sentimiento de pertenencia al grupo. Existen destacados casos en donde las organizaciones invierten tiempo y recursos para mejorar las relaciones entre funcionarios, ya que se entiende que es un poderoso combustible para acelerar la transformación cultural. Pues bien, ¿qué hacer entonces? Creemos muy relevante evitar esconder estos factores debajo de la alfombra y perder el miedo a medirse y diagnosticar el clima. Y luego, cuando toda la empresa se reconozca con fortalezas y debilidades, se debe gestionar el cambio, hacer las cosas de forma distinta,[/fusion_text][/fusion_builder_column][/fusion_builder_row][/fusion_builder_container]
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